lunes, 16 de abril de 2012

Libros inacabables.

Aquellos que aun después de ser escritos, siguen escribiéndose en cada lector. Como La tregua, y otros tantos que no me atrevo a releer por miedo a que ya no sean lo que tengo imaginado.

Cuento de Galeano para irse a dormir:


Dicen las paredes

A la salida de Santiago de Cuba: "Cómo gasto paredes recordándote".

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